SONETO 14
No de las estrellas
tomo mi discernimiento,
sin embargo, creo saber de astronomía,
mas no
predigo mísera suerte o alegría,
ni adivino peste, escasez o un buen invierno;
no sé de la ventura de efímeros minutos,
y no indico a nadie su trueno, lluvia y viento,
ni a los príncipes hablo sobre su destino
leyendo las señales que llegan de los cielos;
tomo de tus ojos la sabiduría,
tus ojos, estrellas donde claramente leo
que florecerían la verdad y la belleza
si tú aceptaras no ser su único dueño.
Y si no lo hicieras puedo
predecir:
La belleza y la verdad con tu
muerte tendrán fin.
SONETO 18
¿Puedo compararte con un día de verano?
Tú eres más amoroso y más templado.
Fuertes brisas agitan los brotecillos de mayo,
Y el plazo del estío termina prontamente;
El ojo de los cielos brilla a veces muy ardiente,
Y su piel dorada a menudo se oscurece,
Todo lo bello se apaga en algún momento,
Por azar, o antojo de la naturaleza;
Pero tu eterno verano nunca mermará
Ni perderá la hermosura, que es tuya,
Ni gozará a la muerte de hallarte entre sus sombras,
Cuando en líneas eternas tú creces en el tiempo.
Mientras los hombres respiren y sus ojos vean,
Vivirán mis versos y a ti te darán vida.
SONETO
20
De
mujer pintó tu rostro la naturaleza,
a ti, dueño y señora de mi febril
pasión,
Frágil
el sentir de las mujeres tienes
pero no su falsía ni su
ligereza,
tus ojos brillan más y son menos
traicioneros,
y
tu mirada dora todo lo que contempla:
el
porte de tu hombría nos pone en cautiverio,
a
los hombres hechiza y a las damas prenda.
Mujer te diseñó natura en el
principio,
y mientras te forjaba de ti se
enamoró,
entonces, arrobada, te dotó de una
parte,
que a mi intención no sirve, y de
ti me privó.
Pero
al dotarte para goce de mujeres,
Mío sea tu amor, y de ellas los placeres.
SONETO 43
Cuanto más entrecierro los ojos mejor veo,
pues durante el día miran cosas sin valor;
pero cuando duermo a ti te veo en sueños,
y a mis opacos ojos alumbra tu esplendor.
Entonces, tu sombra, que a sombras ilumina,
¡qué feliz espectáculo daría
brillando en pleno día con tu luz mucho más clara,
si a ojos que no ven tu destello enciende!
¡Qué bendita sería mi mirada
si pudiera verte en la luz de la mañana
pues en la oscura noche tu imagen imperfecta
a través del sueño en ciegos ojos queda!
Los días son noches
hasta que te veo
Y en las noches
brilla el sol al divisarte en sueños.